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Durante el confinamiento muchos museos cerraron sus puertas. Ese fue también el caso del Museo del Prado, en Madrid, que no abrió de nuevo hasta principios del mes de junio. Desde entonces no había vuelto a ofrecer una exposición temporal, hasta ahora.
Ha llegado a El Prado la exposición de mujeres pintoras olvidadas “Invitadas. Fragmentos sobre mujeres, ideología y artes plásticas en España (1833-1931)”, que rescata obras relacionadas con las mujeres que han sido olvidadas.

¿En qué consiste la exposición?

El Museo del Prado se ha lanzado a la piscina con una de las exposiciones más ambiciosas de los últimos tiempos, donde se propone saldar la deuda de la historia del arte con las mujeres.
Esta exposición, que tenía programada su fecha de inicio para hace seis meses, se ha tenido que retrasar debido a las circunstancias, pero no ha quedado en el olvido.
Miguel Falomir, el director del museo, ha dicho que esta exposición es, además de la más ambiciosa, la más compleja desde el punto de vista conceptual de las que han ofrecido en mucho tiempo. Antes de sacar a la luz esta exposición, ha habido un trabajo de más de dos años de investigación.
Con esta exposición, el Museo del Prado pretende dar visibilidad a las autoras de obras pictóricas que existieron durante el siglo XIX y principios del siglo XX; así como explicar las dificultades a las que se tuvieron que enfrentar en su tiempo.

¿De qué partes consta la exposición?

La exposición consta de dos partes. La primera, en la que los hombres son los autores de las obras, pero donde las mujeres son la obra en sí misma. Tal es el caso de pinturas como “Soberbia” de Baldomero Gili y Roig o “Crisálida” de Pedro Sáenz Sáenz.
La segunda parte de la exposición está formada por obras firmadas por mujeres. En esta parte, se nos muestra el trabajo de diferentes autoras de la época, como Marisa Roësset, Julia Alcayde Montoya o Jane Clifford.

Mi opinión sobre la exposición “Invitadas”

Durante siglos han existido mujeres que se han dedicado al arte. Sin embargo, a lo largo de la historia, la mujer como pintora ha estado olvidada. Tanto en los libros de arte, como en los museos y exposiciones en general, la mujer artista no ha recibido tantos galardones como muchos hombres.
Además, a lo largo de los años, en las clases de historia del arte y en las escuelas, se nos ha llegado a hacer creer que no existen mujeres pintoras. La razón es que han omitido el arte hecho por mujeres en gran parte de las enseñanzas.
Creo que esta iniciativa que ha tenido el Museo del Prado, en la que como vimos lleva más de dos años trabajando, ha abierto una puerta. Una puerta que puede llevarnos a ver que sí han existido y existen mujeres pintoras de una calidad impresionante.
Pero, también, una puerta que puede llevarnos a escribir de nuevo la historia, permitiendo que esas mujeres pintoras formen parte de ella y que las próximas generaciones aprendan de ellas y de su importancia.
De esta manera, poco a poco, podremos enseñar que ha habido muchos hombres pintores y artistas; y, del mismo modo, también ha habido mujeres que han hecho grandes obras pictóricas y deben ser reconocidas por su talento.